Abierto por vacaciones
No oleré a mar salada ni a arenas de playas del sur. No me quejaré del agua fría de Arosa ni nos calará la lluvia en Santiago. No compraremos jabones en La Toja, ni pasearemos por las calles de Cambados. No me sorprenderá la noche de Cudillero, ni la tranquilidad de Novellana. No cruzaré selvas cantábricas buscando playas desiertas ni me asomaré a sus acantilados con ojos de niño asombrado. No me perseguirá una gaviota furiosa entre las calitas de Conil. No caminaremos desnudos por aquella inmensa y solitaria playa del sur. No tomaré café en las terrazas de Oviedo o Avilés, ni cervecitas en las noches de Sevilla. No atascaré mi coche en las arenas de El Rocío. No me refrescaré en las fuentes de Córdoba. No pasearemos entre ruinas y vestigios de tiempos pasados. No admiraremos monumentos y paisajes de otros lugares.
Me conformaré con unas cervecitas frías y buena compañía. Café con hielo al atardecer en cualquier terraza de mi ciudad. Paseos por el río, el frescor de los museos y por que no, de los centros comerciales. Escapar a la sierra, al pantano, incluso a volver a esas piscinas abarrotadas que hace siglos que ignoro. Las chapuzas pendientes de la casa, colgar por fin los cuadros olvidados, la silla que cojea, la luz que no luce, los cacharros que no funcionan. Dar más tiempo a mis aficiones, editar los videos de este año, preparar las últimas fotos, escribir a los amigos. Abrir mis carpetas de dibujos y, tal vez, añadir alguno nuevo. Leer por fin algún libro por el simple placer de hacerlo. Olvidarme de la informática, del trabajo y de los problemas. Y sobre todo imaginarme a cientos de kilómetros de mi vida habitual.
Tengo toda una semana por delante.
Me conformaré con unas cervecitas frías y buena compañía. Café con hielo al atardecer en cualquier terraza de mi ciudad. Paseos por el río, el frescor de los museos y por que no, de los centros comerciales. Escapar a la sierra, al pantano, incluso a volver a esas piscinas abarrotadas que hace siglos que ignoro. Las chapuzas pendientes de la casa, colgar por fin los cuadros olvidados, la silla que cojea, la luz que no luce, los cacharros que no funcionan. Dar más tiempo a mis aficiones, editar los videos de este año, preparar las últimas fotos, escribir a los amigos. Abrir mis carpetas de dibujos y, tal vez, añadir alguno nuevo. Leer por fin algún libro por el simple placer de hacerlo. Olvidarme de la informática, del trabajo y de los problemas. Y sobre todo imaginarme a cientos de kilómetros de mi vida habitual.
Tengo toda una semana por delante.
9 comentarios
Brisa -
Me encanta que seas indiscreto,jajajaja, y que me empieces a echar de menos, antes de irme :)Yo también te encontraré a faltar, puedes escrbir algo en mi blog, así a la vuelta lo primero que haga es leerte. Brisa locaderemate te deja besitos para estos días :) Y sigue disfrutando de tus vacaciones ¿oki? no te olvides de hacerlo.
Miguel -
Brisa ¿dónde te vas tan lejos? ¿Cuándo te vas? ¿Cuándo vuelves? Muchas preguntas indiscretas pero es que con estos calores creo que no podré vivir mucho tiempo sin mi brisa urbana ;-) Tuya es la culpa, por soplar suavemente.
Olivia, tienes toda la razón. Por eso en los últimos años cuando he ido al mar busco playas desiertas, o semidesiertas, que haberlas haylas. Y aunque requieran un pequeño esfuerzo merece la pena.
Te haré caso maRia, en realidad te lo estoy haciendo.. Simplemente ESTOY de vacaciones. Lo único es que el lunes que viene me acordaré de ti, por que a ti te quedan muchos lunes para dejar de ESTAR.
Golfo, el café con hielo me encanta en verano, aunque siempre tengo que dar un pequeño sorbo al café antes de echarlo a los hielos es como si le traicionase ;-)
Marta dale un beso a tu sobrina, que seguro que ha sido gracias a ella por lo que te has dejado caer por aquí. Cuando vuelvas contestaré a tu correo ;)
Voy a darme un vuelta por ahí aprovechando que estoy solo en casa.
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Miguel -
Veo que todos estáis de acuerdo en más o menos lo mismo. En realidad yo también, pero permitidme que sienta un poco de nostalgia de esas playas que este año no pisaré y de esos paseos por ciudades y pueblos que no son los míos y que no veré. Vaya, sentir nostalgia de algo que no ha ocurrido , ¿no es para preocuparse? O tal vez para escribir un post.
En realidad hasta hace unos años el mar me traía más o menos sin cuidado (ya lo contaré) pero con este son dos veranos que me quedo en tierra (tengo delante un poema muy curioso, a contranatura en esto del mar).
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Marta -
Sólo te diré una cosa, que disfrutes mucho, y lo pases en grande con el café con hielo, con la peduga, con tus dibujos, y... Nada más, que me voy a la playa :P
Besos!!
olivia -
ah, unas fotos muy buenas.
Golfo -
maRia -
(8>)
maRia -
Un biquiño.
Brisa -
PS: Por cierto te ha quedado genial la foto y el texto.